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El RS 6 es la acción concreta de la marca alemana para encuadrarse en el segmento de los súper deportivos ciudadanos. La competencia escasea y se remite únicamente al binomio alemán: BMW M5 (507 CV) y Mercedes Benz Clase E 63 AMG (517 CV). Otros fabricantes poseen sport sedan (Cadillac con la Series V y Jaguar con su R), pero ninguno alcanza a rivalizar.
Pensados para un público netamente masculino, las reacciones y prestaciones generales describen un modo de conducción deportiva. Pero también invaden el terreno familiar, donde el comprador (según el departamento de marketing de Audi) siempre supera los 35 años y debe transportar hijos y pertenencias varias. Por ello es que la manejabilidad es simple y ofrece espacio para cinco pasajeros.
Creado por el departamento de alta performance de Audi —GmbH— el RS 6 se basa en la plataforma del A6 presentado en 2004. Los más memoriosos deben recordar dos modelos anteriores que formaron el estilo actual del RS 6. Se trata del RS 2 del año 1993 y el RS 4 del 2000. Ambos poseían motores muy poderosos, tracción integral y carrocerías familiares.
Audi redefine el término alta performance en la clase ejecutiva de vehículos ciudadanos. Su motor proyecta cifras sin precedentes, siendo incluso el impulsor más poderoso en la historia de la marca. Con diez cilindros en V (mismo block utilizado por los S6 y S8) produce 580 CV a 6250 RPM. La inyección de combustible es directa (FSI) y ayudada por una pareja de turbo compresores elevan el torque hasta 479 ft.-lbs.
Las prestaciones del RS 6 no conciben comparación y sólo muestran datos para el infarto. Necesita de 4.6 segundos para alcanzar las 60 millas por hora y 14.9 segundos hasta las 125 mll/h. Su velocidad máxima se encuentra autolimitada a 155 millas. En 2005 la generación preliminar, llamada RS 6 Plus, aumentó el límite y lo situó en 175 millas horarias, pero la Comisión alemana de Seguridad Vial no aprobó esta idea y clausuró, para las siguientes generaciones ese punto.
En materia de frenos, cuenta con discos sólidos de un compuesto cerámico y miden 19 pulgadas de diámetro. Preparados para ser usados con mucha exigencia, la cerámica utilizada reduce el calor en los mismos. Los neumáticos son 255/40 R19.
La transmisión es automática secuencial (Tiptronic) y consta de seis marchas. Con levas detrás del volante, los cambios son accionados del mismo modo que un Formula 1. La tracción es integral (Quattro) y reparte 60 % al eje trasero y 40 % al delantero.
Las suspensiones fueron diseñadas para consentir a los pasajeros y suavizar la marcha. Los brazos incorporan el sistema electromagnético que refuerza o dulcifica su accionar dependiendo de la carga y su movimiento. Inaugurado por el TT (y previamente utilizado por Cadillac) este novedoso sistema posee un líquido que es electrificado y endurece las partículas químicas (Iones) interiores.
A su vez, la suspensiones son administradas por el Dynamic Ride Control. Este sistema reduce las oscilaciones de la carrocería, aumenta la dureza y ayuda al conductor con la resistencia del volante.
Fue desarrollado con tres posibilidades: la primera “Confort” aplica la máxima suavidad al conjunto dirección-suspensión-motor, pero conservando el ADN deportivo del RS 6. El segundo “Dynamic”incrementa el modo deportivo y reduce la acción del control de estabilidad ESP. Queda para el final el modo “Sport”, donde dicho sistema apenas intercede en la conducción.
En interior sólo cambia las butacas delanteras por unas Recaro de última tecnología. Se mantienen las cinco plazas y el baúl con 565 litros de capacidad. El exterior, además de su imagen extrovertida —con faldones laterales y spoilers delanteros y traseros— posee faros con LED´s y luces bixenón direccionales.
Autor:Juan Ponieman